De la vida ordinaria

La "modernidad" nos ha traído nuevas formas y conceptos para ver la vida en todos sus aspectos. Es el caso que ya ni siquiera nos sorprendemos cuando alguien, por ejemplo el plomero, nos ilumina sobre el significado de una palabra desconocida; y ojo que lo hace con la soltura de un experto.
¿GLUTEOPLASTIA TRIDIMENSIONAL, le suena?
Cuéntame el plomero que es una técnica que busca remodelar el cuerpo distribuyendo el elemento adiposo; o sea la grasa, que se acumula en los glúteos y las zonas aledañas. Se realiza con anestesia local de manera que a 24 horas de la operación el paciente se incorpora a sus actividades ordinarias con un mínimo de cuidados, entre ellos una prenda modeladora que llevará por 10 días. Se combina, me sigue explicando, con otras técnicas como la Laserlipólisis, la lipomovilización interna y la suspensión con unos hilos especiales dispuestos de manera también especial en los glúteos.
¿Pero cómo es eso?
Deja el experto el sellador a un lado y con la llave inglesa en la mano, señalando una nalga aquí o un muslo allá mientras habla, me explica que el láser licua el tejido adiposo para que el organismo lo libere de forma natural. La técnica de los hilos es todavía más incomprensible así que lo interrumpo preguntándole de dónde sabe todo eso y como si fuera a contarme el secreto de la existencia divina, en un guiño del cuerpo más que del ojo responde:
Mi señora se lo hizo hace un mes y viera como ha quedado. ¡Es una pinturita!
Me voy pensando en una frase que cierre esta historia.
Si usted está buscando información estética, consulte al plomero.